Txt y fotografía por: Daniela Acosta @violet_dny
El pasado 14 de Septiembre se llevo a cabo Ceremonia, un festival que tardó muchísimos años en realizarse por parte de los curadores, en dónde finalmente con la confirmación de Animal Collective, se llevó acabo…con un huracán invadiendo la República, las lluvias (como era de esperarse) cesaron en efímeros momentos que se sintieron como gloria.
El festival comenzó con la participación de Mentira Mentira que con ánimo animaron a los asistentes que comenzaron a llegar y resguardarse en los espacios predestinados para que no cayera la lluvia. Al comienzo de Little Jesus, la gente ya se había rendido de cubrirse del agua que parecía no acabar y decidió escapar y andar por el campo viendo las distintas actividades que había alrededor.
El escenario de Ed Banger Records fue el más afectado por la lluvia y su consecuencia más grande fue el lodo cuasi movedizo que tenías que cruzar para llegar al frente del este escenario que albergó a Yesco, Breakbot, Nosaj Thing y su acto principal, Justice DJ Set, quienes a pesar de sus problemas de audio lograron sacar adelante una gran ambientación esperada por muchos.
El escenario principal sin embargo estuvo lleno la mayoría del tiempo, pero fue hasta la llegada de Toro y Moi, que estuvo a su máxima capacidad. El día termino y la participación de Purity Ring amenizó y tranquilizo el frío con un ambiente melancólico y ruidoso a la vez, ambiente que nos hacía duda que una persona tan chiquitita podía tener tanto énfasis en su voz.
Toro y Moi sin embargo, fue lo más movido de la tarde/noche, causando el acumulo de casi toda la gente que había mantenido estancia por muchas horas en el escenario Ed Banger Records.
Nicolas Jaar y Animal Collective fueron los últimos actos de la fría noche, y sí, jamás dejó de llover por completo…sin embargo, a pesar de todos los contratiempos que este festival tuvo, logró mantener la logística en píe. A pesar de todas las opiniones, hay que aceptar que es algo admirable que a menos de una semana de realizarse el festival, lograr una buena logística después de un cambio de sede, mal tiempo y cancelaciones de bandas, es una buena señal.
Sin duda esperamos una nueva edición el próximo año, ¿será?
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